Así hacía periodismo Armando Saldaña en uno de los estados más peligrosos para la prensa
México D.F. a 7 de mayo de 2015.- “No sabemos por qué lo mataron. Él no le debía nada a nadie”.
Marlén respira hondo y mantiene la voz firme, a pesar de que han transcurrido tan sólo unas horas desde que el cuerpo de su padre, el periodista Armando Saldaña, apareciera con cuatro balazos la tarde del lunes 4 de mayo en una zona de cañaverales de Acatlán de Pérez; municipio oaxaqueño ubicado a unos diez kilómetros de la localidad veracruzana de Tezonapa, de donde era originario el comunicador.
La mañana del 3 de mayo, el periodista de 52 años, de estatura baja y corpulenta, piel tostada por el sol de la zona cañera de Veracruz, sonrisa fácil y la voz algo rasgada, salió en busca de notas como hacía a diario. Al momento de su partida su hija cuenta que estaba tranquilo, platicador y de buen ánimo. Rasgos que describían la personalidad bullanguera y abierta de “Saldaña”, como lo conocían en buena parte de los municipios de la Cuenca del Papaloapan; desde Cosolapa hasta Tierra Blanca, pasando por Córdoba en la zona centro del estado.
Animal Político entrevistó a familiares y reporteros veracruzanos sobre el trabajo del periodista asesinado número 17 en Veracruz del año 2000 a la fecha; el 12 desde que Javier Duarte gobierna la entidad.
Lee la nota completa aquí.