
ARTICLE 19 se solidariza con la organización Cristosal
Ciudad de México 17 de julio de 2025.- Desde ARTICLE 19 nos solidarizamos con la organización Cristosal, cuya directiva dio a conocer el día de hoy que se ha visto forzada a suspender temporalmente sus operaciones de El Salvador, tras la “declarada intención” de ruptura del gobierno con la construcción de un horizonte político en el que se garantice el respeto y promoción de los derechos humanos.
Lamentamos este punto de quiebre en el contexto salvadoreño, que se evidencia en la escalada de agresiones en contra de la voces críticas y la persecusión del trabajo de personas que defienden a víctimas y denuncian las violaciones a derechos humanos -de las que también son sujetas- las organizaciones, los medios y las personas defensoras de derechos humanos y periodistas independientes, hasta forzarles a abandonar El Salvador.
La salida forzada de Cristosal muestra el alcance que tiene el auge de autoritarismos en Centroamérica e interpela las bases de la popularidad de gobiernos como el salvadoreño que se han valido de la politización de las necesidades sociales a costa de la violación de derechos humanos y la asfixia del espacio cívico. Actualmente, según datos de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (UCA), cerca del 60% de la población teme opinar, promoviendo una “cultura de miedo, como un mecanismo de control social.”
El exilio tras la persecusión y acoso judicial y administrativo, no es una novedad en el caso de El Salvador. En el primer mandato del presidente Nayib Bukele, el medio El Faro sacó su figura jurídica para evitar represalias por su labor periodística. ARTICLE 19 en 2023 también documentó el caso de una periodista exiliada por el acoso judicial en contra de un familiar por la publicación de una nota periodística.
Por su parte, el día 13 de junio de 2025 la Asociación de Periodistas de El Salvador (APES) dio a conocer que al menos a 40 periodistas se les forzó a abandonar el país, ante la ola de persecuciones, hostigamientos, amenenzas, encarcelamientos y ordenes de aprehensión que buscan silenciar las voces que se oponen a la narrativa oficial que estigmatiza, desacredita, espía, criminaliza y discrimina entre enemigo y aliado con base a la crítica a su gobierno.
Las personas defensoras de derechos humanos y periodistas independientes no son enemigos de los gobiernos, sino actores que con una perspectiva crítica y constructiva, en armonía con el Estado, pueden apoyar en la consecución de objetivos como el fortalecimiento de la democracia mediante el desarrollo de capacidades técnicas, fomento de la rendición de cuentas, incidencia en el respeto a los derechos humanos contenidos en leyes y tratados suscritos por los gobiernos entre otras.
Ante la falta de instituciones que les respalden; la inexistencia de condiciones para ejercer su labor y de frente a “un aparato represivo” que actua sin limites hasta obligar a decidir entre “el exilio y la cárcel”, reconocemos y respaldamos la labor de Cristosal y otras organizaciones salvadoreñas que se mantienen del lado de las víctimas y en la lucha por un mejor porvenir, pese a los desafíos actuales.