Respuesta Ficticia (Informe trimestral enero – marzo 2013)
México D.F. a 8 de abril de 2013.– En el primer trimestre de 2013 ARTICLE 19 ha registrado un total de 50 agresiones. Esto representa 11 agresiones más en comparación con el mismo periodo del año anterior. En estos primeros meses se han registrado 3 ataques contra medios de comunicación, 1 asesinato, 1 desaparición y 8 privaciones ilegales de la libertad. Las amenazas, 13 en total, son las agresiones más comunes. Las entidades más violentas son Coahuila 8, Tlaxcala 8, Veracruz 6, Oaxaca 5, Sonora 5.El principal perpetrador de agresiones fue el crimen organizado, siendo presuntamente el responsable de 19 agresiones.
En contraste el martes 26 de febrero la subsecretaria de Asuntos Jurídicos y Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, Lía Limón, externó la “preocupación” del gobierno del presidente por el panorama al que se enfrentan los periodistas.
Ocho días después de los ataques a El Siglo de Torreón 20 personas fueron presentadas a los medios como los presuntos responsables de los ataques. Las detenciones las realizaron la Policía Federal, la Secretaría de la Defensa Nacional y la Procuraduría de Justicia de Durango. Sin embargo al cierre de este informe no se cuenta con información sobre la situación jurídica en la que se encuentran los presuntos delincuentes.
Pocos días después de los ataques en Coahuila se registraron, en Chihuahua, dos atentados con armas de fuego en cd. Juarez y el asesinato del periodista Jaime González Domínguez, en el municipio de Ojinaga. La madrugada del 6 de marzo la fachada de El Diario y del Canal 44 fueron atacadas con armas de fuego por sujetos a bordo de camionetas. Hasta el cierre de este informe las autoridades no tenían registrado hallazgos importantes que sirvieran para esclarecer la agresión.
Días antes de estos ataques, el 4 de marzo, el Secretario de Seguridad Pública de Cd. Juárez, Julián Leyzaola, criticó la ética de los medios de comunicación en la región; y afirmó que son “un punto negro” y advirtió que “lo único que están haciendo es que ellos mismos construyan su propia tumba”.
La impunidad con la que operan los agresores de la prensa fomenta los ataques en contra de la libertad de expresión, y amedrentar el derecho de la sociedad a estar informada e impone el silencio a los medios de comunicación como política editorial.
Las nulas condiciones de seguridad a las que se enfrenta el gremio periodístico han llevado a varios medios y periodistas a doblegarse ante las presiones de los grupos criminales. Uno de los casos más recientes es el del diario Zócalo de Saltillo, cuyo directivo fue amenazado públicamente. En una editorial, publicada el 11 de marzo, establecen que en “virtud de que no existen garantías ni seguridad para el ejercicio pleno del periodismo, el Consejo Editorial de los periódicos Zócalo decidió […] abstenerse de publicar toda información relacionada con el crimen organizado.” La responsabilidad de salvaguardar la integridad de sus trabajadores llevó al medio a suspender toda información relacionada con el crimen organizado.
El veto informativo impuesto a los medios tradicionales no ha desmotivado o minimizado la búsqueda de información por parte de la sociedad. Nuevos medios de información han surgido a raíz del silencio forzado que viven los medios. El uso de redes sociales, principalmente Facebook y Twitter, se ha convertido en una herramienta para romper el cerco informativo. No obstante los usuarios que informan a la sociedad sobre lo que está ocurriendo no se encuentran exentos de las agresiones. Miembros de un grupo criminal ofrecieron más de medio millón de pesos a cambio de datos que identifiquen al administrador de la cuenta de Facebook “Valor por Tamaulipas”.
El Estado mexicano ha incumplido con su obligación de proteger la integridad física de los comunicadores y castigara a los agresores. Al fallar con sus obligaciones solamente está fomentando la impunidad.